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Descubre los secretos del juego de Magnus Carlsen
    Acerca de las clases

    El entrenamiento del genio

    Magnus se preparó, a diferencia de otros genios, casi exclusivamente con el ordenador. Pero igual que se aprende rápido, los conocimientos aparentemente no pueden ser tan profundos, a menos que tu memoria o tus condiciones naturales absorban enseguida todos los conceptos.

    Pero no solo el estudio con el ordenador fue importante. Los libros de Kasparov Mis geniales predecesores tuvieron gran influencia en su juego (gracias a sus colaboraciones en la revista holandesa New in Chess logró todos los tomos). Según Henrik, recuerda básicamente todo lo que se escribe en esos tomos. Y es verdad que ahí podemos calibrar en su justa medida la herencia clásica del ajedrez.

    Carlsen tomó contacto con un excelente entrenador y el mejor jugador noruego, Simen Agdestein, ya desde una temprana edad, a los 9 años (en España sería difícil entender la postura desinteresada del número uno noruego), pero no fue hasta alcanzar los 2000 de Elo cuando su relación se hizo más estrecha… En ese momento, pocas veces se reunían para analizar en vivo y era más un trabajo de contacto a distancia. Carlsen casi siempre se apoyaba en un trabajo individual, tomando decisiones personales en su preparación. Así que en realidad se trata de un virtuoso en el campo autodidacta, como lo fueron antes Fischer y Kasparov.

    Desde los 10 años Carlsen iba progresando a pasos agigantados. Uno de sus primeros libros fue Find the Plan del danés Bent Larsen. Un libro sobre planes de actuación en una posición concreta. Su motivación era alta, y el ajedrez le cautivaba.

    El desarrollo del conocimiento de las aperturas de Carlsen va inequivocamente ligado al de su primer entrenador Simen Agdestein, quien a veces le entregaba un libro sobre una apertura concreta para que lo estudiara. Al día siguiente este pequeño genio parecía estar muy familiarizado con esa apertura, como si llevara años practicándola. Así pues, a los 15 años, ya parecía dominar sistemas complejos como la Variante Sveshnikov o el Sistema Botvinnik de la semieslava.

    En 2005 Agdestein vio que no podría seguir inculcando los pasos adecuados en el complejo pensamiento de Carlsen, y recurrió a otro entrenador, en este caso, un jugador muy fuerte, con muy buena base teórica, Peter Heine Nielsen. Él estaba trabajando con Vishy Anand en ese momento. Y resulta curioso que dada esa relación, a veces invitaba a Magnus para que participara en la preparación de un torneo importante de Anand, como el Campeonato del Mundo que disputó con Kramnik en 2008. Eso seguro que le sirvió de mucha experiencia.

    Ni Karpov ni Kasparov eran mejores a su edad (a los 13-14 años) que Carlsen. Quizá antes sí. En realidad, el fenómeno noruego estalló a los 12 años, puesto que antes simplemente estuvo recuperando el tiempo perdido (aprendió tarde a jugar).

    Ya en 2005 valora correctamente la posición, conduce el juego posicional y sitúa muy bien las piezas (como sus antecesores Karpov, Smyslov).

    En 2006, por fin, pudo proclamarse Campeón de Noruega Absoluto, tras sus pequeños fracasos en los dos años anteriores. Recordemos que en el año 2004 su nombre empezó a aparecer en los medios de todo el mundo. Se estrenó en Wijk aan Zee “C”, en enero de 2003 con un aplomo impresionante. En ese momento era difícil que un joven de 13 años pudiera empezar con 1 d4 o 1 e4 indistintamente “con las dos manos”. Pero lo curioso es que la presión le impidió imponerse en los primeros Campeonatos Mundiales y Europeos de su categoría.

    Abandonó la India de Rey enseguida, y la Alekhine. Rápidamente su trabajo con Nlelsen se notó. Se trataba de encontrar de una manera rápida y efectiva no solo la mejor jugada sino la decisión más óptima. Para él es muy importante mantener la tensión de la lucha. Y resolverlo con medidas concretas.

    En el verano de 2009, después de un pequeño retroceso en su juego, empezó a trabajar con Garry Kasparov. Es curloso que en 2005 este le invitara a entrenarse, en Moscú, con entrenadores de la talla de Razuvaev y Nikitin, pero el niño noruego prefirió seguir su preparación individual.