Spassky vs Fischer, Reykjavik 1972 13a Partida
Por primera vez en el match, Fischer empleó la Defensa Alekhine, otra desagradable sorpresa para Spassky. “Lo diré francamente: no se hizo ningún análisis serio de las variantes de esta apertura. Esto fue así porque buen número de expertos, incluido el propio Spassky, estaban convencidos de que Fischer era extremadamente constante en sus gustos de apertura y que contra 1.e4 era improbable que jugase nada que no fuese la Defensa Siciliana” (Krogius).
1.e4 Cf6
Alguna vez había jugado Bobby así, pero contra oponentes más flojos.
2.e5 Cd5 3.d4 d6 4.Cf3 g6
Otra desviación, esta vez de la línea principal, 4… Ag4, que produce un fuerte efecto: las blancas comienzan a jugar por intuición ¡y pierden un peón en pocas jugadas!
5.Ac4 Cb6 6.Ab3 Ag7
Rara vez se juega 6… a5. En mi juventud logré una espectacular victoria en esta variante contra Palatnik (Daugavpils 1978), y también recuerdo la partida reciente Grischuk-Ponomariov (Torshavn 2000): 7.a4 (después de 7.e6!? Axe6 8.Axe6 fxe6 9.Cg5, Palatnik y Alburt solían responder 9… Cc6 10.Cxe6 Dd7 11.De2 Cd8) 7… Ag7 8.Cg5 e6 9.f4 dxe5 10.fxe5 c5 11.c3 cxd4 12.0-0! 0-0 13.cxd4 Cc6 14.Cf3 f6 15.Cc3! fxe5 16.Ag5 Dd7 17.dxe5 Cxe5 18.Cxe5 Txf1+ 19.Dxf1 Dd4+ 20.Rh1 Dxe5 21.Ad8, con una peligrosa iniciativa por el peón.
7.Cbd2?!
Una jugada demasiado cautelosa y un tanto artificial, sobre todo si la comparamos con las continuaciones más naturales:
- 7.Cg5 d5 8.f4 Cc6 9.c3 f6 10.Cf3 (Karpov-Torre, 1973), o bien 7… e6 (la aguda variante de Alburt) 8.Df3 De7 (8… 0-0 9.Dh3) 9.Ce4 dxe5 10.Ag5 Db4+ 11.c3 Da5 12.Af6 Axf6 13.Dxf6 0-0 14.Dxe5, y en ambos casos las posibilidades de las blancas son algo mejores.
- 7.exd6 cxd6 8.0-0 0-0 9.Te1 Cc6 10.h3 Af5 (si 10… e5?!, Anand recomienda 11.Ag5 Dc7 12.Cc3! Cxd4 13.Cxd4 exd4 14.Ce4) 11.Cc3 Tc8 12.Ag5! h6 13.Ae3, con una ventaja mínima (Anand-Timman, 1992).
- 7.De2 Cc6 8.0-0 0-0 (o bien 8… dxe5 9.dxe5 Cd4 10.Cxd4 Dxd4 11.e6! Axe6 12.Axe6 fxe6 13.Cd2, Geller-Alburt, 1975) 9.h3 a5 (9… Ca5!? y Cxb3) 10.a4 dxe5 11.dxe5 Cd4 12.Cxd4 Dxd4 13.Te1, con la iniciativa. Así es cómo Short (Tilburg 1991) y Leko (Wijk aan Zee 1996) jugaron contra Timman. La primera de estas partidas es famosa por una preciosa incursión del rey blanco en un tablero lleno de piezas: Rg1-h2-g3-f4-g5-h6 y Dg7 mate!
7… 0-0 8.h3?!
Innecesaria profilaxis en lugar de la jugada de desarrollo 8.0-0.
8… a5 9.a4?!
Este peón se convierte en un objetivo de ataque, y las blancas comienzan a tener problemas. Puesto que se han retrasado en desarrollo, deberían haber optado por la modesta 9.c3.
9… dxe5 10.dxe5 Ca6! 11.0-0 Cc5 12.De2 De8!
Las negras han creado un ataque imperceptible al peón de a4. La influencia de la filosofía ajedrecística de Steinitz se nota en la forma de jugar de Fischer. Cree en el triunfo de la defensa y acepta con agrado los sacrificios contrarios
Smyslov
13.Ce4
Si 13.Cd4 Ad7!
13… Cbxa4
También era buena la posicional 13… Cxb3!? 14.cxb3 Ae6.
14.Axa4 Cxa4 15.Te1
Con 15.Dc4 (Gligoric), las blancas recobrarían el peón pero cederían por completo la iniciativa: 15… Ad7 16.Dc7 Dc8! 17.Dxc8 Tfxc8 (Timman), o bien 15… b5!? 16.Dxc7 Dd8.
Bondarevsky aportó una peculiar evaluación de la situación creada:
Las blancas han sacrificado un peón, y Fischer, como era de esperar, aceptó el regalo sobrestimando de nuevo la importancia de un peón extra (lo que, en mi opinión, es un defecto significativo en su juego). Creo que las blancas están algo mejor. Sus piezas están muy bien situadas, y el peón de e5 deja fuera de juego al alfil de g7 y propicia la creación de un fuerte juego en el flanco de rey. Las negras, por su parte, carecen de la necesaria armonía en la disposición de sus piezas (su dama está mal situada y el caballo se encuentra en la banda), y siguen requiriendo tiempo para consolidar sus efectivos.
¿Veía realmente Spassky esta posición con los ojos de Bondarevsky? Después de todo, su evaluación parece dogmática y no tiene en cuenta los factores dinámicos latentes. Creo que Fischer, que pensaba en términos absolutamente concretos, no veía ninguna amenaza por parte de su oponente y se proponía, sencillamente, convertir su ventaja de peón…
15… Cb6!
Timman le concede un signo de interrogación a esta jugada y recomienda la “lógica” 15… Af5 con idea de 16.Cd4 (16.Cg3 Ae6) 16… Axe4 17.Dxe4 Cc5, y las blancas no tienen compensación por el peón (18.Dh4 Dd7, etc). Pero Fischer no tomó el peón para devolverlo de inmediato, en caso de 16.Dc4!? b5 17.Dxc7, aunque después de 17… Dd8 las negras habrían conservado posibilidades ligeramente mejores.
16.Ad2!?
Provocando a5-a4, con idea de emplear la casilla b4 para un ataque. Pero el peón negro avanza una casilla y, por tanto, era de considerar 16.Ag5. Las blancas esperan crear presión y quizá también un ataque en el flanco de rey, teniendo en cuenta que el peón extra de su oponente no juega por el momento un papel especial.
16… a4 17.Ag5
Ahora la dama negra está atada a la defensa del peón de e7.
17… h6 18.Ah4 Af5!?
Provocación marca de la casa. Si 18… Ad7 (Gligoric), entonces 19.Dd2! y Db4. La recomendación de Smyslov y Tal, la simple 18… Ae6 parece mejor, pero después de 19.Cc3! las blancas conservan posibilidades de tablas: 19… Cd5 20.Cxd5 Axd5 21.c4 Ac6 22.Cd4 (con idea de f2-f4) 22… Ad7 23.c5, o bien 19… Ta5 20.De4 Cd5!? 21.Cxa4 Da8 22.Ta3 b5 23.Cc5 Txa3 24.bxa3 Af5 (no 24… Dxa3? 25.Cxe6) 25.De2 c6 26.c4! Dxa3 27.cxd5 Dxc5 28.dxc6, etc.
19.g4?!
¡Las negras consiguen el ansiado debilitamiento! “Merecía seria consideración 19.Cd4, y es arriesgado 19… Axe5?! 20.Cxf5 gxf5 21.Cg3, mientras que si 19… Axe4 20.Dxe4 c6, entonces 21.f4 e6 22.Ce2! y Cc3” (Smyslov). En lugar de 20… c6, Timman recomendó 20… c5!? 21.Ce2 g5 22.Ag3 Dc6! 23.Dxc6 bxc6 con mejor final, pero aquí 21.Cf3! es más tenaz.
19… Ae6!
No 19… Axe4 20.Dxe4, y si 20… Ta7 21.Db4! Cc8 22.Af6!?, o bien 21… g5 22.Ag3 c6 23.Dc5, con compensación concreta por el peón.
20.Cd4
Ahora, si 20.Cc3 las negras disponen de la fuerte réplica 20… Ta5 21.De4 Cd5! y en caso de 22.Cxa4? Da8 23.Ta3 b5 24.Cc5 Txa3 25.bxa3, las negras ganan con 25… Dxa3!, puesto que no es posible 26.Cxe6? fxe6 (aquí puede verse el efecto del avance g2-g4).
20… Ac4 21.Dd2 Dd7
No sé por qué Fischer no jugó 21… Axe5. En tal caso, tanto 22.Dxh6 Ag7 23.De3 Cd5 24.Dd2 (Gligoric) 24… b6 25.Tad1 Td8, ó 23.Dd2 Dd7 24.Tad1 Tfe8 25.Db4 Axd4 26.c3 Db5!, como 22.Cc5 (Timman) 22… Axd4 23.Dxd4 g5 24.Ag3 Td8 25.De4 Db5! dejan a las negras con una clara ventaja y todas las posibilidades de ganar.
22.Tad1
Si 22.f4 Tfc8 23.Cc5 Dd5, ó 23.Ted1 c5 también es malo para las blancas.
22… Tfe8?
Las negras se complican mucho la vida al evitar el favorable cambio de peones 22… Axe5! 23.Dxh6 Ag7. Se diría que Fischer consideraba esta posición técnicamente ganada y subestimó las amenazas de las blancas. De haber conocido Bobby la opinión de Bondarevsky, ¡seguramente habría tomado en e5!
23.f4!
De pronto, la actividad de las blancas se vuelve muy peligrosa.
23… Ad5 24.Cc5 Dc8 25.Dc3?
“Si Spassky se hubiese encontrado en buena forma, el desenlace de esta partida habría sido muy distinto” (Bondarevsky). Uno de los principales indicadores del estado de forma es la percepción de un momento crítico en la partida. ¡A ese momento se ha llegado aquí! La preciosa sugerencia de Smyslov, 25.e6! Cc4 26.De2! Cxb2 (Timman añadió 26… Cd6 27 Cf5!, o bien 26… Ta5 27.exf7+ Rxf7 28.Cde6!) 27.Cf5!! les habría dado a las blancas un fuerte ataque a lo Tal, en el que hasta la dudosa jugada g2-g4 hubiera resultado útil:
- 27… Cxd1?! 28.Cxg7 Rxg7 29.De5+ Rh7 30.Dxd5 Td8 31.Df3! a3 (31… f6 32.Cd7 Cb2 33.Axf6!) 32.Axe7 a2 33.Cb3 Cb2 34.f5!, o bien 29… f6 30.Dxd5 Cb2 31.g5! hxg5 32.fxg5 Dd8 33.Cd7! y el rey negro probablemente no sobreviva.
- 27… Ac4 28.exf7+ Rxf7 29.Dxe7+! Txe7 30.Txe7+ Rf8 31.Cd7+ (Timman) 31… Dxd7 32.Tdxd7 Ac3! 33.Te3! (33.Cxh6 a3 34.Tf7+ sólo da jaque perpetuo) 33… gxf5 (pero no 33… a3? 34.Ae7+ Re8 35.Txc7 gxf5 36.Af6+ y Axc3, o bien 33… Aa5? 34.Af6 gxf5 35.Tee7! Ab6+ 36.Rh2 Ac5 37.Th7, ganando) 34.Txc3 a3 35.Td8+ Txd8 36.Axd8 a2 37.Ta3 Cd1 38.Af6 Rf7 39.Aa1!, con posibilidades de convertir la calidad de ventaja.
En lugar de 25… Cc4, las negras deben crear inmediato contrajuego en su flanco con 25… a3! (Prins), y si 26.b3? a2 27.f5 (Timman), entonces después de 27… Dd8! el peón de a2 debería valer más que el ataque: 28.Af2 fxe6! (28… gxf5 29.De2!) 29.c4 Dd6 30.Ccxe6 Axe6 31.Txe6 Dd7 32.Ta1 gxf5 33.gxf5 Ted8!, o bien 28.Db4 Dd6 (no 28… gxf5? 29.gxf5 Dd6, en vista de 30.Cb5 Dc6 31.f6!!) 29.Cb5 Dc6 30.Cd4 Axd4+ 31.Dxd4 gxf5 32.gxf5 Rh7 33.Rh2 Tg8, con decisiva ventaja material. Por consiguiente, la jugada correcta es 26.bxa3! Txa3 27.Dh2 fxe6 (27… Axd4+ 28.Txd4 f6 es más sólido) 28.Ccxe6 Axd4+ 29.Cxd4 e6 30.f5!?, o bien 30.Cb5!?, con juego agudo, ¡en el que los tres resultados son posibles!
Tras dejar escapar esta excelente oportunidad, Spassky sigue jugando a ojo y dentro de un par de jugadas quedará en posición prácticamente desesperada.
25… e6
Suprimiendo las explosiones atacantes de las blancas como 25… Cd7?! 26.Cxd7 Dxd7 27.f5!; 25… Cc4?! 26.Cf5! gxf5 27.Txd5 Cb6 28.Td3 fxg4 29.Tg3 h5 30.Tf1! Df5 31.Cxb7, o bien 25… a3 26.bxa3 Cc4 27.a4 b6?! 28.Cf5! gxf5 29.Txd5 Cd6! 30.Dg3! bxc5 31.exd6 exd6 32.Txe8+ Dxe8 33.gxf5 Txa4 34.Td2! Rh7 35.Tg2 Ah8 36.f6, con la iniciativa por el peón. Las negras podían haber jugado 25… c6, pero de todos modos no podrían precindir de e7-e6.
26.Rh2
Las negras están mejor después de 26.Ta6 c6 27.Af2 Dc7 (Timman), o de 26.Ce4 Axe4 27.Txe4 c6 y Dc7, dificultando el avance f4-f5. Pero merecía consideración 26.Cb5, dificultando, a su c7-c6.
26… Cd7?!
Curiosamente, el juego de Fischer también es bastante febril. Algunos comentaristas le concedieron a esta jugada un signo de admiración, pero hubiera sido mucho mśa preciso 26… c6 27.Ce4 Axe4 28.Txe4 Cd5 29.Dd2 b5, o incluso mejor 26… Af8! 27.Ce4 Axe4 28.Txe4 c5 (28… a3!?) 29.Cf3 Dc6, disponiéndose a convertir el peón extra.
27.Cd3?
La jugada perdedora. Si 27.Cb5 Cxc5 28.Dxc5 (Gligoric), las negras disponían de la fuerte réplica 28… Ta5! 29.Db4 b6, o bien 29.c4 Ac6 (Soltis). En cualquier caso, Spassky tenía la oportunidad de explotar la imprecisión de su oponente:
- 27.Ce4 b6 28.Cb5! (no 28.Cf6+?! Cxf6 29.Axf6, en vista de 29… Axf6 30.exf6 c5! 31.Cf3 Axf3 32.Dxf3 c4, etc) 28… Axe4 29.Txe4 Cc5 (Timman) 30.Te2 Db7, o bien 28… Cc5 29.Cxc5 bxc5 30.Dxc5 Af8 31.Dd4 Db7, y la ventaja negra es relativamente pequeña. Tampoco está clara esta inteligente línea: 28… Db8 29.Dxc7! Cxe5! 30.Dxb8 Cf3+ 31.Rg3 Texb8 32.Rxf3 f5 33.gxf5 gxf5 34.Tg1!, con contrajuego. El ordenador que todo lo ve propone 27… g5?! 28.fxg5 hxg5 29.Cxg5 Axe5+ (no 29… Cxe5 30.Ag3 Cg6 31.Dd3), pero aquí les espera un jarro de agua fría a las negras con 30.Txe5! Cxe5 31.Cdxe6!! Cf3+ (31… Axe6 32.Ce4! y Cf6+) 32.Rg3! fxe6 (32… Txe6 33.Txd5 Cxh4 34.Cxe6 Dxe6 35.Te5 Dh6 36.Th5, con igualdad) 33.Cxf3 c5 34.De3 Dc7+ 35.Ce5 Dg7 36.Ag5!, o bien 33… Dd7 34.Af6! Tf8 35.Ce5 Dh7 36.Tf1 y el ataque resuelve todas las dificultades de las blancas. Obviamente, la mejor opción es 27… Ta6!?, con idea de Tb6 y Af8.
- 27.Cxd7! Dxd7 28.Dd3 b6 29.Cxe6! (un golpe que pasó desapercibido a los comentaristas) 29… fxe6 30.c4 Df7 31.cxd5 Dxf4+ 32.Ag3, con buen juego (32… Dg5 33.De4 mientras que si 32… Db4 seguía 33.Dxg6, o bien 33.d6, o incluso 33.Tc1). Si 28… Af8 29.Cxe6! Txe6!? (29… fxe6 30.c4, etc) 30.c4! Tb6 31.Te2 a3 32.bxa3 Txa3 33.Dxd5 Da4! 34.Tg1! (con idea de f4-f5 y e5-e6) 34… Tbb3 35.Ag3 c6 36.De4 Ac5 37.Tgg2 Tc3 38.e6!, logrando tablas.
27… c5!
Trasponiendo eficazmente a un final ganado.
28.Cb5
Si 28.Ce2, sigue 28… b5!
28… Dc6 29.Cd6 Dxd6!
Mucho más sencillo que 29… Teb8 (Gligoric, Timman) que dejaría a las blancas con contrajuego tras 30.Ae7! b5 31.f5 Af3 32.Tb1, etc.
30.exd6 Axc3 31.bxc3 f6!
También esto es bastante mejor que 31… a3!? 32.Ce5 Ac6 puesto que priva al caballo de la casilla e5. El peón a pasado es muy fuerte, y las ilusorias esperanzas de las blancas se basan en su peón de d6 y en la presencia de alfiles de distinto color.
32.g5 hxg5?!
Smyslov (y después de él, Timman) le asigna a esta jugada un signo de interrogación, explicando: “Aquí la intuición posicional abandona a Fischer. Era más fuerte 32… c4 33.Cb4 hxg5 34.fxg5 f5 35.Cxd5 exd5, y no es fácil para las blancas crear contrajuego”. Esto sin duda habría ganado, pero la jugada de la partida no echa por tierra la victoria.
33.fxg5 f5 34.Ag3 Rf7?!
El juego de Fischer de nuevo es un tanto febril. “Era preferible 34… a3! 35.Ce5 Cxe5 36.Axe5 Ted8 37.Tf1 Ta4 38.Rg3 a2, con posibilidades de ganar para las negras” (Smyslov). Habría que decir, más precisamente, que las negras ganarían tras una ardua labor.
35.Ce5+! Cxe5 36.Axe5
Así, las blancas han cambiado el caballo de d7 que estaba bloqueando el peón d, y han activado considerablemente su alfil. Spassky ha divisado un claro contrajuego relacionado con la maniobra de torre f1-f4-h4.
36… b5?!
Un nuevo error técnico, a saber: la pérdida de un tiempo importante (pues, al parecer, Bobby subestimó la maniobra Tf1-f4-h4). Mejor hubiera sido 36… Ted8 37.Tf1 Re8, o incluso 36… a3 37.Af6 (37.Tf1 a2!, pero no 37… Ta4? 38.Af6, con igualdad, como señaló Timman) 37… a2 38.d7 Ted8!, conservando ventaja decisiva.
37.Tf1! Th8!
El gran maestro Lombardy, segundo de Fischer, sugirió 37… Tg8 38.Tf4 Re8 39.Th4(?) Ta7, ganando, pero es mucho más fuerte 39.c4! Las negras, por tanto, están obligadas a tomar medidas drásticas. 37… a3 38.Tf4! Th8! sería una mera transposición de jugadas.
38.Af6!
Pero no 38.Tf4 Th7! (con idea de Re8-d7) 39.c4 bxc4! ganando (Timman). Las blancas, por supuesto, no toman la torre. Aquí es más valioso el alfil, puesto que participa tanto en el ataque como en la defensa de la casilla a1.
38… a3
Si 38… Th7? 39.d7, con igualdad (Timman).
39.Tf4 a2 40.c4! Axc4 41.d7
Se ha superado el control de tiempo y las blancas han sellado esta jugada evidente para aplazar la partida. Spassky, sin embargo, ¡explota una posibilidad práctica!
41… Ad5?
Un momento importante que no menciona ninguno de los comentaristas. Fischer realizó esta jugada, aparentemente lógica, con mucha rapidez, como obligando a su oponente a buscar la mejor réplica ante el tablero, en lugar de tras largas horas de análisis.
Pero parece que aquí las negras echaron por tierra la victoria que sólo podía conseguirse mediante un sacrificio de peón: 41… e5! 42.Axe5, y ahora, no 42… Thf8? 43.Tf2! (43.Af6? Re6 44.Tf3 Txf6 45.Te3+ Rf7 46.gxf6 Td8, ganando) 43… Re6 44.Aa1! Re7 45.Tfd2! Rd8 46.Td6 Tf7 47.Af6+! Txf6 48.Txf6 Rc7 49.Txg6 Td8 50.Tg7 b4 51.Ta1! (51.h4? Ad3!!) 51… f4 52.Rg2, y las blancasa están bien, sino 42… Thd8! 43.Af6 (o bien 43.Tf2 Re6, cazando el peón de d7) 43… Ae2! 44.Te1 Txd7 45.Txe2 a1=D 46.Axa1 Txa1 47.Th4 Rg7, con un final de torres ganado.
42.Rg3!
Esta jugada secreta (que amenaza Th4) es, indudablemente, la mejor. La sesión de aplazamiento de esta intrincada partida resultaría ser virtualmente la más espectacular y emocionante de la historia del ajedrez.
42… Ta3+
En opinión de Geller, las negras podían haber ganado con 42… e5 43.Axe5 Re6 44.Axh8 Txh8 pero difícilmente podía habérsele escapado a Fischer una posibilidad así en el análisis. Después de 45.Tff1! Td8 46.Tfe1+, las blancas se defienden con éxito:
- 46… Ae4 47.Ta1 Txd7 48.Txa2 Td2 49.Ta5 Re5 50.Txb5 (y no la jugada de Timman, 50.h4?, debido a 50… f4+!) 50… Txc2 (50… Tg2+ 51.Rh4 Txc2, otra dudosa recomendación de Timman a causa de 52.Tb6! c4 53.Txg6 c3 54.Tc6) 51.Rh4 Rd5 (51… f4? 52.Tb8 Tc4 53.Tf8!) 52.Tb8 Tc3 53.Td8+ Rc4 54.Te2 con una potencial amenaza al peón de g6.
- 46… Rd6 47.c4 bxc4 48.Te2 Txd7 49.Txa2, y las posibilidades de ambos bandos de nuevo son iguales, pues la recomendación de Timman 49… Re7 50.Tad2?! Te5! no consigue su objetivo en vista de 50.Ta6+! Rc5 51.Te1+ Ae4 52.Txg6 c3 53.Tc6, y las blancas paran los peones enemigos y avanzan los propios.
43.c3 Tha8!
Es insuficiente 43… a1=D 44.Txa1 Txa1 por 45.Th4! y para evitar lo pero (45… Taa8? 46.Axh8 Td8 47.Tb7+! Rg8 48.Te7 Ac6 49.Ae5, etc, Kasparov), las negras tienen que hacer tablas con 45… Tha8 46.Th7+ Rf8 47.Th8+
Smyslov
Hay un desenlace similar después de 45… Tg1+ 46.Rf2 Tg2+ 47.Rf1 Txh4 48.d8=D, o bien 45… f4+ 46.Rf2 Txh4 47.d8=D Ta7 48.Ae5.
44.Th4! e5!
El comienzo de una larga serie de jugadas forzadas que conducen a una posición muy complicada.
45.Th7+ Re6 46.Te7+ Rd6 47.Txe5 Txc3+ 48.Rf2 Tc2+ 49.Re1
El rey ha escapado de los jaques, pero los análisis de Fischer se extendían más allá.
49… Rxd7! 50.Texd5+
Si 50.Tdxd5+? Rc6 51.Td1 b4, ganando.
50… Rc6 51.Td6+ Rb7 52.Td7+
Timman recomendó la tablista 52.Te6?, pero después de 52… Ta3 53.Td7+ Rc8 54.Td8+ Rc7! (55.Te7+ Rxd8), los peones negros son irresistibles.
52… Ra6! 53.T7d2 Txd2 54.Rxd2 b4
Con tres fuertes peones por una pieza, las negras tienen evidente ventaja, pero ¿es suficiente para ganar? La salvación de las blancas radica en la creación de su propio peón pasado.
55.h4! Rb5 56.h5! c4 57.Ta1!
No 57.h6? c3+ 58.Rd3 a1=D, ganando.
57… gxh5 58.g6 h4! 59.g7!
Juego brillante por ambas partes: ¡su imaginación en este final es realmente irresistible! En caso de la simplificadora 59.Axh4? Tg8 60.Txa2 Txg6 61.Ta8 c3+ 62.Rc2 Tg2+ 63.Rd3 Td2+ 64.Re3 Td6!, uno de los peones negros inevitablemente corona.
59… h3 60.Ae7! Tg8
Fischer encuentra una solución paradójica: ahoga su propia torre, pero bloquea el peón pasado blando, atando el alfil a su defensa. Ahora cinco peones pasados estarán luchando contra la torre blanca. Nada similar había ocurrido antes en ajedrez. Spassky estaba pasmado y perdió. Smyslov pronto encontró la forma de hacer tablas para las blancas, pero ¿las habría encontrado ante el tablero sentado frente a Fischer?
Botvinnik
61.Af8!
La única forma. Después de 61.Af6? (Gligoric) 61… h2 62.Rc2, las negras habrían ganado rápidamente con 62… Te8! 63.Th1 (63.Rd2 f4!) 63… Te2+ 64.Rd1 Tg2 65.Txh2 Tg1+ 66.Rc2 c3.
61… h2
O bien 61… c3+ 62.Rd3 h2 63.Tf1 f4 64.Td1 f3 65.Rd4 f2 66.Rd3 Rc6 67.Rc2 a1=D 68.Txa1 Rd5 69.Rd3 c2 70.Rxc2 Re4 71.Rf1! Rf3 72.Ac5, con tablas (Soltis).
62.Rc2 Rc6
Una posición excepcional: las negras tienen su torre desconectada del juego, pero los ¡cinco! peones pasados les garantizan, como mínimo, la igualdad
Smyslov
63.Td1!
Una jugada precisa, cortando al rey negro y asegurándose las tablas.
63… b3+ 64.Rc3
Más sencillo hubiera sido disponer inmediatamente una fortaleza con 64.Rb2! f4 (64… h1=D 65.Txh1 Rd5 66.Rd1+ Re4 67.Tc1 Rd3 68.Td1+ y Tc1) 65.Td6+ Rc7 66.Td1! f3 67.Rc3 f2 68.Rb2 (Gligoric). Las negras tienen muchos peones ¡pero no coronarán!
64… h1=D!
La última posibilidad. Las negras entregan uno de sus peones para llevar su rey hacia el peón f. Si, de inmediato, 64… f4, entonces 65.Td6+ Rc7 66.Td1 f3 67.Rb2, etc.
“Fischer percibió muy bien mi inseguridad durante el juego”, declaró Spassky después del match. A su vez, Bobby compartió sus impresiones con Krogius acerca de la partida. Dijo que había visto la indecisión de su oponente antes de la jugada 25, cuando podía haber creado un fuerte ataque, y añadió: “También vi que Spassky subestimó el peligro de su posición en el momento en que tenía cinco peones contra su torre”.
65.Txh1 Rd5 66.Rb2
Si 66.Td1+ Re4 67.Te1+ Rf3 68.Rb2! f4 69.Tc1! Re2 70.Txc4 f3 71.Tc1 f2 72.Rxb3 f1=D 73.Txf1 Rxf1 74.Rxa2 también habría llevado a tablas.
66… f4 67.Td1+
No 67.Tc3? f3!
67… Re4 68.Tc1 Rd3 69.Td1+?
¡Un trágico erro! Spassky se quiebra bajo la increíble tensión y yerra fatalmente el camino hacia las tablas: 69.Tc3+! Rd4! (69… Re2 70.Txc4 y Tc1, con tablas) 70.Tf3 c3+ (70… Re4 71.Tc3) 71.Ra1 c2 72.Txf4+ Rc3 (después de 72… Re3? 74.Tf1 Rd2 75.Rb2, las negras incluso habrían perdido ) 73.Ab4+ Rd3 74.Tf1 Txg7 75.Rb2, con tablas (Smyslov), o bien 73.Tf3+ Rd2 74.Aa3! (Gligoric) 74… Txg7 75.Txb3 Tc7 76.Ab2, con tablas (Timman; 76.Th3 ó 76.Tb8 también es bueno, pero no 76.Rxa2? Ta7!).
69… Re2
Ahora, uno de los peones negros se convertirá en dama.
70.Tc1 f3! 71.Ac5
Las blancas han perdido un tiempo muy importante y después de 71.Txc4 f2 72.Tc1 f1=D 73.Txf1 Rxf1, no tienen tiempo para tomar en b3.
71… Txg7
Ahora y en la jugada siguiente la inmediata f3-f2 también hubiera ganado, pero Fischer tiene su propio camino hacia el objetivo.
72.Txc4 Td7 73.Te4+
Si 73.Tc1 Td1.
73… Rf1 74.Ad4 f2 y las blancas se rindieron.
Si 75.Tf4 Txd4! 76.Txd4 Re2 y f1=D
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